¡Cupcakes y brownie terroríiificos!

Antes de que pase más tiempo, que ya estamos con las Navidades, hago esta entrada  enseñando las guarrerías que preparamos para  Halloween.  

No es que seamos muy fans de Halloween en sí. A nosotras nos gusta más llamarla la noche de Ánimas, como ha sido siempre, que además da como más miedito XD Pero sí que nos gustan las decoraciones de calaveras, gatos negros, brujas, etc... Especialmente en repostería, ¡hay unas cosas tan chulas! Cápsulas para cupcakes de vampiro, huesos de caramelo, moldes de ataúdes...

El año pasado nos quedamos con las ganas de hacer algo para esta fecha, pero este no quisimos dejarlo pasar. 

Así que cuando en la academia de inglés anunciaron una fiesta de Halloween en la que se celebraría una competición de dulces espeluznantes, aprovechamos la oportunidad de sacar el arsenal de decoraciones "de miedito" y nos pusimos manos a la obra.

Aquí tenéis el resultado :) 

Para empezar, unas cupcakes terroríiiiificas. La receta es la ya clásica en nosotras tarta de zanahorias con su crema de queso, pero adaptada a cupcakes. Tenéis la receta en una entrada anterior. :) 

¡Un gatoshino malvado!

Quise probar a hacer un gato 3D...seguiremos practicando.

Las figuritas están hechas con mazapán, porque como ya sabéis no nos gusta demasiado el fondant. Para hacer los ojos de las calaveras simplemente usamos bolitas minúsculas de mazapán teñido, y para  los ojos de los murciélagos y los gatos empleamos glasa Wilton (viene en tubo) de color rojo.

Para teñir la crema de queso con ese tono tan bonito, usamos colorante en pasta, también de Wilton. Nos encanta el color que salió :) 

Pero la gran novedad fue esta que os presentamos a continuación...¡El brownie-cementerio! 

¡Tacháaaan! ¿Qué os parece? 

La receta que hemos empleado es un brownie de Oreo que ya habíamos hecho en otras ocasiones, con lo que también fuimos sobre seguro salvo en la decoración, que nunca habíamos hecho nada así. 

Desde el primer momento supimos que queríamos decorarlo para que pareciera un viejo cementerio abandonado. Tras investigar y documentarnos un poco cómo hacerlo, nos liamos la manta a la cabeza. 

Las lápidas están hechas también por nosotras, son tipo Spekuloos, unas galletas de azúcar moreno, jengibre y canela, muy típicas de las fechas navideñas en ciertos países europeos. 

os interesa, en una próxima entrada pondré la receta, porque están riquísimas *_* Utilizamos unos cortadores que teníamos del año pasado pero como ya digo, se nos torcieron los planes y no pudimos utilizar, pero esta vez le hemos dado buen uso. 

Para las maderas de la verja derruida, utilizamos mitades de palitos tipo Mikado, usando un poco de chocolate derretido como "pegamento".

Para pintar los rótulos de las lápidas utilizamos glasa Wilton de tubo, esta vez negra. Como remate, unos huesitos de azúcar, de Wilton también. 

Y por fin, aquí tenéis la receta del brownie. Cogimos la receta del blog de Dulce sentimiento y lo cierto es que la creemos cuando dice que es la mejor receta del mundo;  está riquísimo.

• 400 gramos de chocolate (200 de chocolate con leche y 200 de chocolate puro) Recomendamos los de Mercadona por ejemplo, están hechos por Antiu Xixona y están buenísimos.
• 250 gramos de mantequilla sin sal
• 5 huevos L
• 320 gramos de azúcar moreno (para ser sinceras nosotras pusimos un pelín más :P) 
• 150 gramos de harina de fuerza -importante que sea DE FUERZA, no harina normal, porque si no no queda tan jugoso. La encontraréis en Mercadona sin problemas.
• 20 galletas Oreo (o más, va a gustos)
• Si os gusta con nueces o frutos secos, también podéis añadirle. 

-Derretimos el chocolate con la mantequilla en el microondas. 

-Mientras se enfría, mezclamos los huevos y el azúcar aparte en un bol.

-Añadimos la harina de fuerza (mejor tamizada, para que no haga grumos) y mezclamos.

-Cuando tengamos una mezcla homogénea, añadimos la mezcla de chocolate y mantequilla.

Forramos un molde (mejor que sea grandecito) con papel de horno y vertemos la mezcla. 

Ahora es cuando hacemos trocitos las Oreo (y los frutos secos si los usáis) y las repartimos por toda la masa. 

Metemos el brownie al horno a 180º unos 25 minutos, o hasta que al pincharlo el palillo salga un pelíiin manchado, porque por fuera quedará tostadito, pero por dentro tiene que quedar jugoso. 

Nosotras hemos hecho como ella, hemos usado mitad chocolate con leche y mitad negro, pero podéis usar toda la cantidad de uno solo si el sabor del chocolate os gusta más fuerte o más suave.

¿Y cómo hemos conseguido la textura de tierra seca del cementerio, os preguntaréis? Muy fácil: le dimos la vuelta al brownie para decorarlo ;) 

Ya veréis cómo es una receta riquísima y no puede ser más fácil.

Próxima entrada, las galletas Spekuloos. No os arrepentiréis, tienen trabajillo pero merece la pena. 

 ¡Nos leemos!